¿Qué tal os va? Yo estoy bien, algo tocada del estómago pero contenta y feliz. He tenido algunos problemillas estas semanas que me han impedido continuar con el blog como os prometí, pero ahora he vuelto y para quedarme.
Os tengo preparados unos super tutoriales sobre como hacer sushi, que empezaré el lunes. Además de eso, dentro de poco tengo un gran encargo para el 1er cumple de mis sobris y será el momento perfecto para hacer el tutorial sobre cupcakes que también os prometí.
El post de hoy viene relacionado con la primavera, me encanta el sol, me gusta sentarme a la terraza y tomarme un buen té o un café mientras veo como anochece.
Hace algún tiempo mi amiga Tara (Tarareando en la cocina) nos propuso el reto de hacer unas muffins, da igual como fuesen.
La diferencia más relevante entre muffin y cupcake es su eleboración, la cantidad de mantequilla y que las muffins suelen ser un poco más grandes y más densas y no suelen llevar decoración por encima, a no ser que sean de pepitas de chocolate o algo asi.
Dado que me gustan mucho para acompañarlas para el café o mojar en la leche, pensé que no quería el muffin tradicional de frutos rojos o chocolate y me decanté por la fruta deshidratada que le da un toque mucho más rústico.
Sin duda estaban buenisimos y al dejarlos un poco más en el horno conseguí una corteza crujiente y muy agradable a la hora de saborear.
Me encanta la pinta que tienen |
Así eran por fuera, y antes de enseñaros como eran por dentro os dejo los ingredientes y su preparación.
INGREDIENTES
- 200 gr de harina
- 100 gr de azúcar
- 80 gr de mantequilla
- 1 cucharadita de levadura
- Una pizca de sal
- Canela en polvo
- 2 huevos
- 60 gr de fruta deshidratada
PREPARACIÓN
- En un bol, mezclamos la mantequilla con el azúcar hasta que quede una pasta homogénea. (Si la mantequilla no se mezcla bien, se derrite en el horno y acaba creando mucha grasa que hace que suba a la superficie de las muffins una capa aceitosa y muy desagradable)
- A la mezcla, le añadimos los huevos uno a uno.
- Añadimos la harina, con la sal, la canela y la levadura y mezclamos bien.
- A toda la masa le incorporamos la fruta deshidratada y volvemos a mezclar.
- Repartimos la mezcla en los moldes de los cupcakes (Yo suelo usar de silicona con una cápsula de papel dentro) siempre llenando poco más de la mitad del papelito para que al hornear no se salga la masa.
- Metemos en el horno previamente precalentado a 200º durante unos 15-20 minutos dependiendo del tamaño de nuestras muffins.
- Sacamos y dejamos enfriar y.... ¡Listo para comer!
Se ven los trocitos de fruta del interior, pasas, coco, etc. |
TRUCO:
Como ya he comentado antes, una de las diferencias más características entre cupcake y muffin es la temperatura del horno, a mayor temperatura, más sube la masa y más copete se hace (se llama copete a la parte que sobresale del papel).
La mayoría de cupcakes al ir decorados no precisan de tanta temperatura en el horno pero si de un mayor tiempo de cocción. Así que ya lo sabéis:
- Mayor temperatura = Menor tiempo de cocción y más copete (Forma redondeada)
- Menor temperatura = Más tiempo de cocción y una superficie más plana (Ideal para decorar cupcakes)
Y con esto y un café con muffins, me despido hasta el lunes... ¡Con la primera parte del tutorial de sushi!
Muchos besos y abrazos primaverales. Alepei!!!